En los próximos días los alcoholímetros que funcionan en la Terminal Terrestre serán colocados en las oficinas municipales ubicadas a la salida de los vehículos y estarán a cargo de los Policías Municipales de Tránsito, explica, Wilfrido Paz, administrador.
El funcionario detalla que se adecúan las instalaciones para trasladarlos en los próximos días, de tal manera que se pueda tener un control más efectivo de los equipos y de las pruebas que se realizan los conductores.
Juan Francisco Loaiza, director provincial de la Agencia Nacional de Tránsito, destaca que el equipo técnico de la institución a su cargo, realiza el monitoreo permanente de las máquinas y brinda el mantenimiento de las mismos, toda vez que los alcoholímetros fueron proporcionados por esta institución, con la finalidad de controlar a los conductores que salen de Loja a otras provincias del país.
En Loja los alcoholímetros funcionan desde junio de 2012 y están conectados al sistema nacional de datos, con el cual los usuarios desde cualquier lugar pueden conocer toda la información personal relacionada a la licencia, infracciones, cédula de identidad, entre otros.
“Este mecanismo se ha convertido en un elemento de seguridad para todos los implicados en la transportación, es decir los dueños de los vehículos, los conductores y los pasajeros”, manifiesta Franco Gómez Jaramillo, gerente de la Unión Lojana de Transporte Interprovincial e Intercantonal. Añade que este control exige a los conductores mayor responsabilidad en su trabajo, ya que antes de iniciar un viaje a cualquier parte del país el chofer debe someterse a la prueba en el alcoholímetro y si está sobrio la máquina le entrega un ticket, caso contrario le negará y no podrá realizar el viaje.