Por cuarta ocasión el Alcalde de Loja presentó al seno del Cabildo el tratamiento y aprobación de la reforma presupuestaria de 2016, que permita continuar con la ejecución de las obras iniciadas y arrancar con otras que se encuentran en proceso de contratación, muchas de ellas previstas en el sector rural del cantón.
La mayoría del cabildo lojano integrada por siete ediles, no aprobó la reforma presupuestaria, situación que dificultará la labor que cumple la municipalidad. La reacción de algunos concejales no se hizo esperar como la de Piedad Pineda que señaló que esta situación se veía venir porque los ediles de mayoría argumentaban que se han comprado vehículos innecesarios, "situación que carece de verdad porque los automotores adquiridos son de trabajo y sirven para las labores diarias como tractores, barredora, montacargas y un carro canasta para la instalación de los semáforos".
La ley prevé otros caminos y el alcalde tendrá que enviar el presupuesto para que entre por el ministerio de la ley y el trabajo continúe ya que no se puede paralizar, reiteró Pineda. A este criterio se sumó el del concejal Iván Ludeña, quien dijo que reprocha la actitud de los ediles que por revanchismo político no aprobaron el presupuesto, "pues la intención es paralizar la obra y luego salir a los medios a decir que no se hace nada".
Ante esta situación, el primer personero municipal deberá ajustarse a lo que determina la normativa legal, y someter la reforma del presupuesto al ministerio de la ley, que le permita continuar atendiendo las necesidades urgentes de la población lojana.