Desde marzo del 2015 el Patronato de Amparo Social Municipal en cooperación con el Ministerio de Inclusión Económica y Social, MIES, lleva adelante el proyecto de Erradicación del Trabajo Infantil en el cantón Loja, para ello han realizado la focalización del problema y el diagnóstico del mismo.
Una vez determinados los casos, el equipo técnico del proyecto ha capacitado a los padres y a sus infantes sobre el derecho que tienen los menores a estudiar, explica Wilmer Carpio, coordinador de Planificación y Proyectos del Patronato Municipal.
El funcionario detalla que encontraron a 250 menores entre niños y adolescentes que trabajaban en construcción, labores agrícolas, comercio y otras actividades. Sostiene que estos pequeños están asistiendo a clases en varios establecimientos educativos de la localidad y en los próximos días les entregarán un kit escolar compuesto por cuadernos y más implementos necesarios, además una mochila y se busca el financiamiento para comprarles los uniformes.
Resalta que existen casos críticos, en los cuales los padres maltrataban a sus hijos porque no llevaban dinero a casa, otros no podían cubrir los costos educativos de los niños porque tienen más de dos en edad escolar; sin embargo, se han establecido acuerdos para que los padres envíen a los niños a educarse y el proyecto les entrega un dólar diario por concepto de movilización de cada pequeño.
Menciona que los recursos son consignados luego de la verificación en el establecimiento educativo que los menores asisten a clases. El nuevo reto es seguir en la atención de este sector vulnerable de la sociedad y se aspira que al menos 225 niños adicionales a los ya atendidos, se puedan beneficiar y reinsertarse al los procesos educativos.
Luego de análisis efectuado por el equipo técnico integrado por 18 personas, la mayor cantidad del trabajo infantil se encuentra en la ciudad de Loja y en menor grado en las parroquias rurales.