El Gas Licuado de Petróleo (GLP), es sumamente explosivo, por ende si se tiene una instalación en su domicilio, en lo primero que debe preocuparse es que exista una distancia considerable entre la cocina y la bombona de gas que según la norma indica de 2 a 3 metros.
Se debe emplear la manguera propiamente para gas y un buen regulador para que no deje que se escape nada. El regulador de fábrica debe ser normado propiamente por el fabricante, evitar golpearlo ni alterarlo, tampoco se le debe poner pesos encima.
El mayor Luis Santos, comandante del Cuerpo de Bomberos del Municipio de Loja, señala que al momento de cambiar un cilindro se debe esperar unos minutos porque su presión aumenta, conectar el regulador a la válvula del cilindro, si está sonando se debe preocupar porque eso no es normal, asimismo se debe oler a fin de constatar que no haya fugas de gas.
En caso de percibir gas no encienda ningún artefacto, tampoco el foco si está apagado o viceversa, alejarse y llamar al Cuerpo de Bomberos, sino está a la mano el número, ventile la casa, busque la fuga sin causar ni una sola chispa.
Santos recomienda jamás virar el GLP con la falsa idea de que puede rendir un poco más.