Uno de los mejores abonos de Loja produce el Municipio Local en la Planta de Lombricultura, que es parte del Centro de Gestión Integral de Residuos Sólidos. El insumo llega a varios sectores del cantón, la provincia e incluso se distribuye en Machala.
La planta, donde trabajan 12 personas, produce al menos 1200 sacos de abono por mes.
José Silva, responsable de la planta de lombricultura, señaló que el proceso inicia con la clasificación domiciliaria y la clasificación en los mercados.
“Los desechos los traemos a la planta y la reclasificamos. Esperamos unos 45 días, una vez que se cumple el proceso de semidescomposición le damos la vuelta y le ubicamos la lombriz”, explicó.
Cada quince días es necesario darle la vuelta al material y regar, manejando el tema de la humedad y la temperatura, así de cuatro a cinco meses está listo un excelente abono.
Este abono llega a todo el cantón Loja, Catamayo y últimamente propietarios de camaroneras de Machala llevan el producto.
“Estamos trabajando también con una empresa israelita que nos ha comprado 21 toneladas de abono, solo tenemos que entregar”, dijo Silva.
El Municipio de Loja desde hace varios años atrás trabaja en la obtención del abono a través de un proceso innovador, es uno de los mejores que se producen en Loja de forma orgánica y natural.
El Departamento de Parques y Jardines utiliza el abono, especialmente el humos de forma permanente para proyectos de reforestación en la ciudad.
“El abono tiene una inmensa cantidad de nutrientes que aporta al suelo y a las plantas”, señaló Leopoldo Samaniego, gerente de Gestión Ambiental.