Cada vez más instituciones, empresas o locales comerciales se unen al trabajo del Municipio de Loja en materia medioambiental. Esta vez la cadena Supermaxi pone a consideración de sus clientes el uso de bolsos reutilizables.
“Ellos desde hace algún tiempo atrás ya vienen utilizando fundas oxobiodegradables pero ahora, presentan esta novedad”, manifestó Luis Bravo, técnico de Higiene del Ayuntamiento Local.
Supermaxi al ser una multinacional, dentro de sus políticas está el de velar por la parte ambiental, tienen varias calificaciones y certificaciones tanto en calidad como en el ámbito de buenas prácticas medioambientales, en ese sentido entregan bolsos reutilizables.
Esta iniciativa es positiva puesto que al año se evitarán unas 200 fundas plásticas convencionales, es buen ejemplo a seguir de otras cadenas, citó Bravo.
La Ordenanza Municipal es clara busca la implementación de prácticas amigables para reducir el índice de la huella ecológica y en ese sentido, la municipalidad dio el primer paso con el uso de fundas oxobiodegradables, “el objetivo es que desde la ciudadanía se tome conciencia y optemos por el bolso reutilizable”, agregó.
Para avanzar aún más el trabajo de cuidar el medioambiente, Luis Bravo, resaltó que cuentan ya con un borrador para incluir en la Ordenanza, ahí se prohíbe la utilización de vajilla plástica de polietileno.
Este proceso tiene que ser aprobado por el Cabildo y luego ser aplicado, se aspira que en febrero del 2019, inicien los procesos regulatorios de este material en la ciudad.
“Las propiedades de una funda o vajilla plástica de polietileno las asimilamos nosotros, se las ingiere al tracto digestivo, lo que ocasiona serios problemas en la salud, de ahí que se debe restringir este producto”, explicó el técnico de Higiene.
Con la puesta en marcha de estas iniciativas, es la oportunidad para que pequeños emprendedores presenten alternativas, por ejemplo, en Esmeraldas se presentó la vajilla hecha a base de hojas de banano, al desecharlas, será materia orgánica para mejorar el suelo.
Desde que entró en vigencia la Ordenanza para reducir la huella ecológica en el cantón, en octubre de 2017, a la fecha el 95% de los locales comerciales utiliza las fundas oxobiodegradables.