A lo largo del proyecto de Regeneración Urbana en la ciudad de Loja se consideró accesos para una normal movilización de personas con discapacidad, que de paso servirá también para mujeres embarazadas, mamás con niños en coches, adultos mayores, otorgando preferencia al peatón. En esquinas o avenidas se instalan rampas de fácil ingreso.
“Hemos considerado este aspecto como elemento fundamental en la ejecución del proyecto”, manifestó, Enrique García, responsable de Regeneración Urbana. Está previsto en todos los frentes de intervención la adecuación de accesos tal y como lo estipula el Conadis y la normativa internacional.
Situación
“Lo que teníamos antes en la ciudad eran unas rampas de difícil ingreso, como por ejemplo la que se ubica en el Banco Pichincha, uno tiene que tener dos o tres personas para ayudar a empujar una silla de ruedas, sin embargo, en los sectores ya intervenidos con Regeneración Urbana los sitios son accesibles.
Loja es una de las ciudades pioneras a nivel nacional en contemplar una plena movilidad de las personas con discapacidad.
Con la Regeneración se normaliza una situación caótica por años, los propietarios de las viviendas se consideraban dueños de las aceras y no existía equilibrio en todo el trayecto, esto en sectores como la calle Gonzanamá, en barrios como El Panecillo hacia el norte pero ahora, en el área de intervención, las aceras tienen la misma dimensión, lo que ha mejorado también la circulación de las personas que se movilizan en sillas de ruedas, no videntes o que padecen alguna otra discapacidad, agregó García.
